El nadador máster Joaquín Canales (Mediterráneo) acaba de regresar del Mundial de Gwanju (Corea del Sur), un evento en el que ha conseguido seis medallas, pese a ser su último año en la categoría de 75-79 años. Este malagueño venció en 400 y 800 libres y 200 estilos y ocupó la segunda plaza en 200 libres, 100 espalda y los 3 kilómetros de aguas abiertas. Este pionero de la natación máster acumula ya más de 40 medallas en europeos y mundiales desde su estreno en 1997.

-¿Cómo vio los resultados conseguidos en el Mundial?
-Pues acabé muy, muy contento; subirte seis veces al podio para recoger tres medallas de oro y tres de plata en tu último año en esta categoría es para estarlo, qué más puedo decir!!!!

-¿Esperaba tantas medallas al ser el último año en su actual categoría?
-Ir a un Mundial, en donde no conoces de antemano a algunos de tus contrincantes, sobre todo los que acaban de entrar en tu grupo y, por lo tanto, cuatro años más jóvenes, es difícil. Es complicado hacer pronósticos, además estando en el último año de tu categoría.

-¿Cómo vio el nivel de la competición con respecto a otros años?
-El nivel en un Mundial siempre suele ser bueno; si bien han faltado algunos de los que estaban en Budapest en 2017, pero ellos también han cumplido dos años más y quién sabe cómo se encuentran. Por el contrario han entrado otros nuevos más jóvenes.

-¿Espera batir en 2020 tantos récords europeos como en 2015 cuando entró en la categoría de +75?
-Con respecto a batir records en mi próxima categoría, siempre habrá alguna posibilidad, siempre y cuando mi estado físico se mantenga tan bien como es actualmente. Debo reconocer que en algunas de las pruebas del programa, tanto en piscina de 25 como de 50, están francamente difícil de batir, ya que están en posesión de Roberto Alberiche, y creo que pasará mucho tiempo hasta que llegue alguien con las facultades de este amigo canario.

-¿En cuáles pruebas se va a centrar el próximo año?
-Las pruebas de crol son las que me exigen menos esfuerzo; me encuentro más cómodo en las pruebas largas, 400, 800 y 1.500, aunque los 200 estilos los gané con bastante facilidad en Gwangju con respecto al segundo clasificado. Es difícil responder en que pruebas me concentraré en 2020 ya que, menos en braza, suelo picotear en todas las demás.

-¿Mantiene intacta la motivación para competir cada año?
-La motivación me llega cada día después de concluir cada entrenamiento y, sobre todo, viendo también como el esfuerzo cotidiano en el agua se traduce al final en éxitos deportivos. Los ánimos también los encuentro al poder sentirme bien físicamente y con algún achaque superable.

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